Los cambios de temperatura en la oficina a causa de la llegada del invierno y el verano pueden alterar el bienestar ambiental de los trabajadores. Es por ello que, especialmente en la época estival cuando se excede en el uso del aire acondicionado o se carece de él, se presenta el gran debate: ¿Cuál es la temperatura ideal para trabajar en una oficina?
Para contestarla vamos a recurrir a la normativa relacionada con la prevención de riesgos laborales sobre temperatura en las oficinas y a las principales instituciones de salud laboral como el INSHT (Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo) o el RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios).
Tabla de contenidos
Qué indica la ley sobre la temperatura óptima para trabajar en oficias
En primer lugar, según el Real Decreto 178/2021 publicado por el BOE por el que se aprueba el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios, determina que las temperaturas máximas y mínimas los edificios deberían ser:
- Entre 23 ºC y 25 ºC debe estar la temperatura en una oficina en verano
- Entre 21 ºC y 23 ºC en invierno
Por otro lado, se recomienda una humedad relativa de entre 45% y 60% en verano y 40% y 50% en invierno y una velocidad del aire por debajo de los 0,2 metros por segundo.
Cabe destacar que todas estas cifras están avaladas por el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios. Ahora que ya conocemos lo que establece el Gobierno de España y acepta el RITE, vamos a ver qué opinan otras instituciones expertas.
Cuál es la mejor temperatura para una oficina según el INSHT
Los valores sobre la temperatura en el trabajo que establece el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo para personas vestidas con ropa de algodón, ropa interior corriente, calcetines y calzado, son muy similares a los anteriores:
- La temperatura de una oficina en verano debe estar entre los 23ºC y los 27ºC
- La temperatura de una oficina en invierno debe situarse entre los 17ºC y los 24ºC
Y en lo que respecta a la humedad relativa del aire, recomienda entre 30% y 70%, excepto aquellos casos a los que se recurra al aire acondicionado, en los que deberá ser como mínimo del 50%. Por otro lado, sugiere que la velocidad del aire sea menor a 0,1 metros por segundo.
Una de las ventajas del teletrabajo es que uno siempre puede adaptar la temperatura de su lugar de trabajo a su gusto, pero deberían tenerse en cuenta estas características para obtener unas condiciones de trabajo óptimas.
Como empresa experta en prevención de riesgos laborales, desde MAS Prevención te recomendamos seguir el consejo de estas instituciones sobre la temperatura para trabajar en oficinas que resulta idónea con el objetivo de cuidar la salud de los trabajadores.