Muchas personas se sienten estresadas por su oficio, no les gusta lo que hacen o simplemente sufren más de la cuenta para levantarse de la cama e ir a trabajar. Es común toparse con casos como estos, pero cuando el trabajo se convierte en una fobia, entonces nos encontramos con un problema mayor.
Descubre qué es la ergofobia, cómo identificarla y cómo puedes superarla en MAS Prevención.
Tabla de contenidos
¿Qué es la ergofobia?
La ergofobia es la fobia a trabajar, una especie de miedo irracional al entorno laboral que puede derivarse del estrés o de ciertas vivencias negativas en el puesto de trabajo. No obstante, en otras ocasiones puede tratarse de un cuadro más complejo inducido por otros miedos o situaciones traumáticas previas.
Un trabajador con ergofobia puede sentirse impedido a la hora de realizar tareas laborales, pero a veces este miedo va más allá e incluye un gran temor por el mero hecho de acudir a la oficina o a su puesto de trabajo.
Síntomas de ergofobia
Las señales que indican que podemos encontrarnos ante un caso de ergofobia en el trabajo son las siguientes:
- Problemas de concentración y de atención
- Ansiedad laboral, angustia y sensación de quedarse sin aire
- Incremento de la frecuencia cardiaca y nerviosismo
- Comportamientos inusuales con compañeros
- Mareos
- Dolor de cabeza
- Malestar general
Como vemos, la ergofobia puede alterar tu bienestar laboral, tanto emocional como físicamente, y convertir tu día en un calvario, pero siempre hay métodos y formas de ayuda para combatir el problema.
Consejos para superar la ergofobia
En caso de que hayas sentido algunos de los síntomas previamente mencionados en el trabajo, has de saber que esta fobia suele tratarse de una condición temporal y que tiene remedio. Por eso te presentamos algunas medidas que puedes tomar:
- Aprende técnicas de relajación: La meditación y el mindfulness pueden ayudarte a mantener la calma y la atención y a sentirte tranquilo a la hora de trabajar.
- No seas demasiado severo contigo mismo: Algunos casos de ergofobia están inducidos por una autoexigencia desproporcionada. Aprende a poner límites a tu perfeccionismo y no te fustigues si las cosas no salen como esperabas.
- Acude a tu médico de cabecera: Si continúas experimentando los síntomas de la ergofobia después de haber puesto en práctica lo anterior, lo mejor es que notifiques a tu médico de tu problema.
- Tratamiento psicológico: Si todo lo anterior no ha sido suficiente para superar tu miedo al trabajo, una intervención psicológica puede ser definitiva para ayudarte. Para tratar la ergofobia es más efectivo exponerse al problema, descartar la evitación y afrontar esas situaciones que generan miedo y tensión.
¿Puedo pedir la baja laboral si tengo ergofobia?
Efectivamente, puedes obtener la baja laboral si padeces ergofobia. Pero para ello deberás ser evaluado por un médico que te conceda el parte de baja por ergofobia.
Este tipo de bajas tienen un tiempo máximo de un año, aunque su facultativo puede prorrogar este periodo por 6 meses más.
¿Te ves identificado con los síntomas de la ergofobia? Si es así, en MAS Prevención, como empresa de prevención de riesgos laborales especializada en fomentar el cuidado y bienestar de los trabajadores, te animamos a notificarlo a tu empresa para que pueda ayudarte y consultar a un profesional que te evalúe y prescriba un tratamiento.