El cáncer de mama es el más común de todos y el que más afecta a la población femenina. Esto nos demuestra la importancia y necesidad de tomar medidas para prevenir la aparición de esta enfermedad y para detectarla precozmente en caso de que llegue a darse.
Llevar una vida saludable puede ayudarte a prevenir o, al menos, a disminuir en cierta medida las posibilidades de contraer cáncer de mama. Estas medidas tienen que ver con la dieta, la actividad física y otros hábitos cotidianos fáciles de implementar en nuestra rutina.
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Una alimentación saludable reduce el riesgo de contraer cáncer de mama
Un estudio elaborado por GEICAM en colaboración con la Asociación Española Contra el Cáncer determinó que la dieta tiene un impacto directo sobre la posibilidad de contraer cáncer de mama, llegando a reducir la probabilidad en un 30% llevando la dieta adecuada.
El estudio revela que existe una relación directa y positiva entre la adherencia a una dieta mediterránea y el cáncer de mama, es decir, una dieta mediterránea, o similar, puede disminuir la probabilidad de padecer cáncer de mama en un gran porcentaje. La dieta mediterránea conlleva el consumo abundante de frutas y verduras, así como de cereales, preferiblemente integrales. También es bueno el consumo diario de algún producto lácteo, pescados y carne blanca como fuente de proteína. No se debe descartar la carne roja, pero sí limitar su consumo. Lo que sí se debe evitar es el consumo de productos procesados y ultraprocesados, y con alto contenido de azúcares.
Otro tipo de productos que se deben evitar son los suplementos dietéticos y vitamínicos salvo que sea por recomendación de un profesional para corregir deficiencias de algún nutriente.
Evitar los malos hábitos
Bebidas como el vino forman parte de la dieta mediterránea y son de consumo habitual entre la población. El vino, sin ir más lejos, tiene propiedades que lo hacen saludable para el corazón, pero no contra el cáncer. De hecho, el consumo de cualquier cantidad de alcohol puede suponer un incremento de las probabilidades de padecer cáncer de mama. ¡Así que no te excedas!
De la misma manera, el consumo de tabaco, otro hábito muy arraigado en la sociedad, también es perjudicial para la salud y un factor de riesgo para contraer el cáncer de mama.
La actividad física reduce el riesgo de padecer cáncer de mama
Llevar una vida sedentaria, con poca actividad física, en la que el consumo de calorías es elevado, multiplica las posibilidades de contraer la enfermedad, sobre todo en mujeres postmenopáusicas. Si a eso le sumas una dieta formada en gran parte por comida rápida y poco saludable, el riesgo y probabilidad se multiplica mucho más.
Por ello es recomendable combinar una dieta como la mencionada anteriormente con una actividad física constante. Por actividad física se puede entender desde andar durante media hora diaria hasta salir a correr, nadar, practicar deportes, etc.
Para las mujeres que han pasado la menopausia, es importante mantener el control del peso y que no se desajuste mucho, para mantener un estado físico saludable.
Dormir bien y llevar un horario de sueño de calidad también puede ser determinante en el día a día para poder llevar esa vida saludable que te ayude a prevenir el cáncer.
La lactancia materna: un protector natural contra el cáncer de mama
No todas las mujeres tienen la posibilidad de dar el pecho y otras deciden libremente no hacerlo, eso es una decisión personal, pero para aquellas que pueden y quieren hacerlo la posibilidad de contraer cáncer de mama se reduce en un 4% por cada 12 meses de lactancia. Existen distintos estudios que coinciden en señalar que la lactancia ejerce un efecto protector sobre el cáncer de mama.
Hazte revisiones mamarias de forma regular
Es imprescindible ir al especialista a hacerte revisiones periódicas de las mamas, sobre todo si tienes una edad que supone un factor de riesgo. No es un hábito que ayude a prevenir, pero si a detectar precozmente, de forma tan precoz que se puede evitar desarrollar la enfermedad.
En MAS Prevención estamos concienciados con el cáncer de mama y la lucha contra el mismo. Por eso, con nuestro plan de promoción de la salud, promovemos hábitos saludables que ayudan a las empleadas a reducir el riesgo de contraer esta enfermedad.