Encontrar una relación directa y específica entre el consumo de un alimento y el aumento o disminución de la probabilidad de contraer cáncer se antoja algo difícil. Sin embargo, como bien dice el código europeo contra el cáncer, la alimentación es uno de los factores clave para la prevención del cáncer.
Existen estudios que dicen que entre el 40% y el 60% de los tumores pueden estar directa o indirectamente relacionados con la alimentación. Estimarlo es difícil, pero lo que es cierto es que debemos prestar especial atención a nuestra dieta.
Aunque resulte difícil de creer, hay alimentos que ayudan a prevenir el cáncer gracias a su composición y características. En este post te presentamos algunos de los más relevantes.
Tabla de contenidos
1. Tomate
El tomate contiene grandes cantidades de licopeno, un compuesto que es el responsable del color rojizo y que varios estudios han determinado que es bueno para reducir el riesgo de cáncer de próstata.
Te recomendamos que introduzcas el tomate en tu dieta aprovechando que tiene cabida en casi cualquier plato, desde ensaladas hasta sándwiches.
2. Brócoli
Otro alimento recomendado para prevenir el cáncer es este archiconocido vegetal de la rama de las crucíferas, que crea divisiones por su sabor entre sus aliados y sus detractores. Esta sabrosa verdura contiene sulforafano, una sustancia con propiedades anticancerígenas aunque fácil de destruir en el cocinado. Deberemos cocinar el brócoli durante un minuto y medio al vapor, si no queremos destruirlo del todo.
Además contiene otros agentes anticancerígenos como el magnesio, cumarinas y alcaloides, pero, sobre todo, vitamina A, que protege frente a distintos tumores.
3. Cúrcuma
La cúrcuma contiene curcumina como principal componente, un agente que cumple características que ayudan a mejorar la salud.
Varios estudios han determinado que la curcumina es buena para combatir algunos tipos de cáncer como el de colon y páncreas, aunque también puede ser beneficioso para el de mama o el de esófago entre otros.
4. Ajo
Uno de los principales componentes del ajo es la alicina, un compuesto que se ha demostrado en diferentes estudios que actúa contra las células cancerosas.
Lo que se recomienda es incluir entre 2 y 5 gramos diarios de ajo fresco en tu dieta para sí favorecer, gracias a sus propiedades, la prevención del cáncer y otras enfermedades.
5. Zanahoria
Las zanahorias, igual que otros alimentos como los melocotones, son una fuente importante de betacarotenos, un agente que ayuda en la prevención de algunos tipos de cáncer como el de pulmón (en personas no fumadoras).
Estamos hablando de un alimento que todos tenemos habitualmente en nuestras neveras y que su consumo es realmente fácil, ya que es de esos alimentos que puede servir como snack o aperitivo. Además es un alimento fresco y con buen sabor. El que no come zanahoria es porque no quiere.
6. Cítricos
Algunas frutas cítricas como la naranja, el pomelo o, cómo no, el limón, contienen grandes cantidades de alcaloides. Diferentes estudios han demostrado que los alcaloides inhiben la unión de agentes cancerígenos al ADN. Así mismo, las naranjas contienen terpenos que, según la AECC, están asociados a la prevención de ciertos tipos de cáncer.
Pero lo más importante, ¿a quién no le gustan estas frutas? Son fáciles de adquirir y se pueden consumir de diferentes formas. Son frutas que aportan frescura y mucho sabor. Incluir alguna de ellas en tu dieta no te supondrá ningún esfuerzo.
7. Aceite de oliva
¿Qué haríamos en nuestro país sin este espectacular alimento? El oro líquido de la dieta mediterránea, sabroso y con una utilidad asombrosa para nuestra cocina, resulta ser también un alimento con propiedades anticancerígenas.
Un estudio llevado a cabo por Predimed durante 12 años demostró que las mujeres que toman cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra al día, reducen la probabilidad de contraer cáncer en un 68%.
Si no tenías ya suficientes razones para consumir aceite, seguro que esta te terminará de convencer.
8. Pescados grasos y pescados azules
Algunos pescados grasos como el salmón ayudan a prevenir el cáncer porque son buenos en vitamina D, selenio y, sobre todo, en ácidos grasos omega 3. Este tipo de componentes son buenos para prevenir tipos de cáncer como el de colon, próstata o mama.
Pescados como el salmón, la trucha, la caballa o la sardina son muy sabrosos y se pueden cocinar de múltiples formas según tus gustos. Comer al menos una vez a la semana hará que tu salud mejore notablemente.
9. Hongos y setas
Los champiñones, el maitake, el shiitake o incluso nuestro apreciado níscalo contienen lentinan, un fitoquímico que estimula el sistema inmunitario, en concreto, inhiben el crecimiento de sarcomas.
No solo son las plantas con más propiedades medicinales, sino que además son sabrosas y pueden aparecer en prácticamente cualquier plato de nuestra dieta.
10. Frutos secos
Algunos frutos secos, como las nueces, tienen ciertas propiedades que les hacen beneficiosos para la lucha contra el cáncer. Tomar un puñado de ellos te proporcionará la vitamina E, derivados del azufre, magnesio y fitoestrógenos que reducen el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer como el de mama.
Estos no son los únicos alimentos que te pueden ayudar a prevenir esta enfermedad, existen otros como la calabaza, los frutos rojos, el trigo, el centeno, el té verde y muchos más. Desde MAS Prevención nuestra labor es ayudarte a concienciarte con la promoción de la salud en todos sus ámbitos, y por eso te recomendamos que te informes de qué alimentos pueden ayudarte a hacer de tu dieta un método preventivo contra ciertas enfermedades.